Hija mía quiero decirte que mi vida no ha sido una escalera de cristal.
Fue todo lo contrario, al ir subiendo los escalones, he encontrado escalones falsos,
partes sin barandal y hasta espacios donde no hay escalones.
Sé que tu vida hija linda por más que yo quiero lo mejor para ti,
no será una escalera de cristal, y yo solo puedo aconsejarte:
Que cuando subas esa escalera y encuentras escalones flojos o inestables,
yo estaré para equilibrar tus temores y tus penas.
Que cuando encuentres tramos que no tengan barandales mi mano
estará allí para brindarte seguridad y darte mi mano para sostenerte.
Cuando encuentres tramos que no te permite avanzar, si esta en
mis manos yo te serviré como puente para que puedas continuar.
Y cuando ya no pueda estar contigo al lado tuyo y necesites
de mi cierra tus ojitos y recuerda nuestro tiempo más bonito que
pasamos juntos y avanza al final de esa escalera que yo te estaré esperando.
Te amo mi hijita linda!
Tu Mamá
Hija mía, sé que tu vida no será una escalera de cristal,
pero recuerda que nuestro amor y el lazo que nos une,
es tan hermoso, puro y transparente como el cristal y
a la vez fuerte y duradero como el acero.
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